El Congreso ha votado a favor de adelantar las elecciones presidenciales. Los peruanos lo piden pues el Congreso es muy impopular. Como sea, si es que tenemos elecciones en abril del 2024, debemos tener claro cuál va a ser el camino. Primero, necesitamos que en la siguiente legislatura se apruebe, de nuevo, el adelanto de elecciones con por lo menos 87 votos. Eso va a ser muy complicado y habrá que buscar los consensos en el Congreso, donde son pocos los congresistas con verdadero liderazgo. Luego, tendremos que votar las reformas políticas: bicameralidad; reelección congresal; eliminar la confianza obligatoria y condiciones para la vacancia por incapacidad del presidente.
¿Habrá los votos para estas reformas o no haremos reforma alguna e iremos a elecciones como estamos? ¿Se condicionarán los votos a una asamblea constituyente?
Por eso pensemos si lo mejor es adelantar las elecciones. ¿vamos a tener un mejor país si adelantamos las elecciones? ¿vamos a lograr las reformas necesarias para que el ciudadano se sienta representado por los políticos? o ¿seguiremos cómo estamos o peor? Tengamos claro que las reformas no cambian a las personas y menos a los políticos. Ningún diseño constitucional va a darnos una mejor democracia, para eso necesitamos otros políticos, no los que tenemos hoy.
Aunque suene muy impopular creo que antes de ir a elecciones debemos hacer las reformas políticas, pero, sobre todo, debemos tratar de construir partidos políticos y a partir de ellos, consensos. No podemos tener, como en las últimas elecciones, 20 partidos queriendo llegar al poder; entraron 10 partidos y ahora hay 12 bancadas en el Congreso, además de los no agrupados. No hay representatividad, no hay partidos, no hay líderes y esa es la desgracia del Perú. Esto no se arregla con elecciones adelantadas. Creo más bien, que las cosas pueden salir peores.
Los partidos políticos son los que ponen en sus listas a los congresistas; son los que, una vez electos, ponen a los ministros y a las autoridades. Un partido político tiene como característica su afán de permanencia e ideología común. No es un partido si sus congresistas votan como quieren “porque votan a conciencia”. Eso no es un partido. El partido tiene ideología justamente para que los electores sepamos qué podemos esperar de ellos y para que sus partidarios compartan teorías sobre distintos temas. Entonces, ¿qué es primero? ¿Las reformas o la creación de partidos? Desafortunadamente no hay reformas que se sostengan sin las personas idóneas para llevarlas adelante.
Es cierto que los congresistas se quieren quedar hasta el 2026 y también es cierto que su aprobación es minúscula y la calle quiere nuevo congreso, pero que viene primero, ¿el huevo o la gallina?